«Estudios, como el Estudio de salud de enfermeras, han encontrado que una dieta antiinflamatoria no solo puede ayudar a prevenir la artritis, sino que también puede prevenir afecciones como enfermedades cardíacas y diabetes que las personas con artritis tienen más probabilidades de desarrollar».
En mi consulta cuando atiendo pacientes que padecen de situaciones inflamatorias como migrañas, gastritis, colitis, dolores musculares, siempre que desarrollamos un plan de alimentación bajo en carbohidratos, y eliminamos ciertos alimentos como el gluten, el cuerpo no solo se desinflama sino que los dolores empiezan a disminuir, y esto al cabo de días.
La inflamación dentro del cuerpo ocurre cuando su sistema inmunológico entra en acción para curar una infección o lesión enviando un ejército de glóbulos blancos. Si tiene un corte, el área que lo rodea puede enrojecerse o hincharse a medida que ocurre este proceso de curación. Pero una vez que el problema está bajo control, la inflamación retrocede y su cuerpo vuelve a la normalidad.
La inflamación crónica no es tan útil para su cuerpo. Si está bajo estrés crónico, es obeso o tiene un trastorno autoinmune, la inflamación no desaparece. Persiste, dañando el cuerpo y potencialmente provocando problemas como artritis, enfermedades cardíacas o cáncer.
Algunas condiciones articulares dolorosas son potencialmente desencadenadas por la inflamación en el cuerpo. Por ejemplo, la gota, que es causada por la acumulación de una sustancia llamada ácido úrico, ocurre cuando se forman pequeños cristales en las articulaciones. Estos cristales irritan los tejidos de la articulación y pueden desencadenar una inflamación crónica. Incluso la osteoartritis, que alguna vez se consideró como un simple desgaste de las articulaciones, ahora se sabe que está asociada con la inflamación crónica, aunque menos de lo que se observa en otros tipos de artritis.
Elegir la dieta adecuada
Yo en mi consulta siempre recomiendo en estos casos, poca cantidad de carbohidratos, azúcar eliminada, productos frescos no procesados, las grasas de la tierra no la de los animales, como el aceite de oliva, aguacate, almendras, aceitunas en lugar de mantequilla, natilla, queso crema, manteca, pellejo de los animales. Preferir cortes de carnes magros y siempre incluir el pescado durante la semana como fuente de omega 3
Los investigadores han notado una reducción en varias medidas de inflamación dentro del cuerpo, como una sustancia llamada proteína C reactiva, en personas que optan regularmente por un patrón dietético antiinflamatorio. Las personas que comen una dieta de estilo occidental han visto el efecto contrario.
Con el tiempo, un patrón dietético saludable puede reducir el riesgo de desarrollar una afección articular dolorosa. Un patrón de alimentación antiinflamatorio a lo largo de los años puede reducir el riesgo de gota hasta en un 60 %. Una dieta constante de alimentos antiinflamatorios también puede ayudar a reducir el dolor en las articulaciones de las personas que viven con osteoartritis y potencialmente retrasar la progresión del daño.
Para obtener el mayor información no dude en contactarnos, tenemos consulta nutricional virtual y presencial. 16 años de experiencia.
Dra. Dayanna Jiménez, nutricionista deportiva
Estamos para servirles.
Fuente:
Harvard Medical School
